El xeropaisajismo es una tendencia que está ganando popularidad en nuestro país ante los cambios que está experimentando el clima. Y es que un jardín xerófito te permite embellecer espacios exteriores con una gran eficiencia en la inversión de recursos.
En Digebis contamos con todas las herramientas que necesitas para organizar y mantener tu jardín xerófito. Nuestros sistemas de riego de liberación lenta son ideales para mantener tu jardín con toda facilidad.
¿Qué es un jardín xerófito?
Un jardín xerófito es una manera de construir tu jardín con especies que no necesitan grandes cantidades de agua. El objetivo es sacar el máximo rendimiento de los recursos hídricos con especies adaptadas a entornos áridos.
Cactus, suculentas y otro tipo de plantas y arbustos adaptados a entornos secos son las especies dominantes en un jardín xerófito. En un país como España, donde las temperaturas son cada vez más elevadas, los jardines xerófitos son cada vez más frecuentes. Así podrás construir un vergel precioso y sin grandes necesidades hídricas.

Ventajas de contar con un jardín xerófito
Un jardín xerófito es la mejor manera de decorar tu espacio sin malgastar recursos. Algunas de las ventajas de contar con un jardín xerófito son:
- Facilidad de mantenimiento: Las especies xerófitas están habituadas a prosperar en climas áridos. En consecuencia, no necesitan tantos cuidados como otras especies vegetales.
- Resistencia a inclemencias climáticas: Las plantas de este tipo de jardines aguantan mejor los climas extremos. Al ser más resistentes, correrás menos riesgos de que tu jardín se estropee ante los cambios meteorológicos.
- Ahorro de agua: Las especies como los cactus no necesitan apenas agua y eso supone un ahorro para ti y también un cuidado del medio ambiente.
Requisitos para construir tu xerojardín
Aunque los xerojardines tienen un mantenimiento mínimo, sí que necesitan cumplir unos prerrequisitos básicos.
- Elección del suelo: Los suelos arenosos mejoran el drenaje de las plantas y ayudan a mantener la humedad necesaria. La elección del suelo se puede completar con el añadido de materiales como cantos rodados o corteza de pino.
- Delimitar las zonas de plantación: Es importante que definamos los espacios que vamos a ajardinar y agrupemos las especies en función de sus necesidades hídricas. Esto ayudará a reducir el consumo de agua. Para ello, puede ser una gran idea utilizar borduras para delimitar los diferentes espacios de nuestro jardín.
Riego eficiente: Por las características de las especies que alberga, un jardín xerófito no necesita tantas cantidades como otro tipo de vergeles. Por eso, lo mejor es implementar sistemas de riego por goteo o liberación lenta.
Especies xerófitas para tu jardín
Como ya hemos explicado anteriormente, los jardines xerófitos están compuestos por especies con baja demanda de agua. Algunas de las más utilizadas son las siguientes:
Cactus y chumberas: Los cactus suelen ser los principales protagonistas de los jardines xerófitos. Estas plantas apenas necesitan agua y sobreviven en ambientes muy diversos. Son ideales para interiores y exteriores y necesitan una gran cantidad de luz solar.
Además, existen una infinidad de especies de cactus con diferentes, formas, tamaños y tipos de flores.
Lo ideal es colocar este tipo de plantas en zonas donde estén expuestas a una intensa radiación solar.
Crasas: Estas especies se caracterizan por su capacidad para retener grandes cantidades de agua y sobrevivir en climas áridos. Aunque, a diferencia de los cactus, carecen de espinas.
Estas plantas necesitan poca agua y deben recibir una gran cantidad de luz solar. De hecho, debemos tener cuidado con la cantidad de riego ya que estas plantas retienen mucha agua y si no se facilita un buen drenaje las raices se puede pudrir.
Algunos ejemplos de suculentas son el aloe vera, las siemprevivas o la echeveria

Conclusión
El xeropaisajismo está marcando tendencia en el diseño de jardines. El cambio climático y la presencia de veranos cada vez más más cálidos presentan a los jardines xerofitos como una alternativa viable.
Los jardines con especies xerófitas permiten embellecer tus espacios con un mantenimiento mínimo, cómodo y eficiente. Y es que las plantas xerófitas apenas requieren agua para el crecimiento lo que las hace ideales para entornos áridos.
Algunas de las especies preferidas para los jardines xerófitos son los cactus y las crasas. Estas plantas retienen gran cantidad de agua en sus hojas y también ofrecen una gran versatilidad para distintas opciones decorativas.
Recuerda que para diseñar tu jardín xerófito es importante delimitar las zonas y agrupas especies con necesidades hídricas similares. También es importante elegir terrenos arenosos que ofrezcan un buen drenaje ya que el exceso de humedad puede perjudicar a estas plantas. Lo mejor en estos casos es instalar sistemas de riego de liberación lenta.
Recuerda que, si necesitas asesoramiento o ayuda para diseñar tu xerojardín, en Digebis tenemos las mejores soluciones y materiales.