Quién tiene un jardín o una terraza, tiene un tesoro. Si eres de esos afortunados, seguro que dispones de muebles de exterior para poder sacarle el mayor partido a tu jardín.
Sin embargo, no solo es importante elegir los mejores o los que mejor se adaptan a tus necesidades; hay que cuidarlos y proteger los muebles de exterior de las inclemencias del tiempo y la suciedad. Pero, ¿cómo? ¿Qué fundas son las más adecuadas para la mesa, sombrilla, barbacoa..?
Como expertos en productos de jardinería y paisajísmo, os queremos facilitar todo nuestro conocimiento a la hora de mantener tu mobiliario de jardín nuevo como el primer día. Como verás, hay que tener en cuenta varios factores y todos son importantes.
Los muebles de jardín deben guardarse adecuadamente en cuanto bajan las temperaturas y llegan las lluvias. Por eso, queremos presentarte nuestras soluciones para guardarlos: Las fundas para muebles de jardín de última generación.
¿Cómo guardar los muebles de jardín?
Mesas, sofás, tumbonas, sillas, parasoles o barbacoas son muebles y elementos de exterior de formas y materiales diferentes. Aunque están diseñados para la intemperie, es muy recomendable protegerlos cuando no se usen. Es decir, en cuanto acaba la temporada, y con el objetivo de mantenerlos en buen estado, se recomienda almacenarlos protegidos para preservarlos de posibles daños.
Pero no pienses que por poner los muebles a cubierto en un garaje o cobertizo ya están protegidos, el polvo y la suciedad son factores de riesgo, y necesitarás su correspondiente funda protectora que además permita que se aireen correctamente. Estas precauciones garantizará a tus muebles una larga vida.
Si por el contrario, decides dejar los muebles en el exterior, debes tener en cuenta un factor que sucede durante todo el año, no sólo en verano: la condensación. Este fenómeno se produce cuando el vapor de agua que circula en la atmósfera se topa con un aire más frío y se convierte en gotas minúsculas. Éstas se depositan sobre el mobiliario de jardín si no está protegido, activando su deterioro.
El sol es nefasto para tus muebles de exterior, ya sean de madera, resina o acero, tanto como el agua de la lluvia (nieve o hielo) o la humedad, que es un foco de hongos, moho y bacterias. Recuerda que contra estos tres últimos factores biológicos, no sólo hay que optar por proteger con fundas, si no que éstas permitan que los muebles se aireen. Además, con la llegada del otoño, aparece un nuevo factor: las lluvias Para evitar su deterioro debido a las inclemencias del tiempo y otros factores peligrosos, debemos actuar para garantizar su mantenimiento en buen estado.
De ahí la importancia de tenerlos eficazmente protegidos gracias a una funda concebida para evitar los UV, resistente a la condensación, la lluvia y el viento y, a poder ser, con costuras que incluyan una banda termoadhesiva para su mayor protección.
En el caso concreto de la lluvia, es muy importante elegir adecuadamente el material y una funda que se adapte al elemento para evitar los charcos o «cráteres» que se llenan de agua estancada. Contra ello, hay fundas especializadas para muebles de exterior con un sistema Pop Up, que la eleva y evita estos inconveniente.
Si hablamos del viento, nos encontramos con la dificultad de mantener la funda en su sitio. Para ello las mejores fundas son la que cuentan con una banda elástica a lo largo de toda su longitud o con cordones para atarla e impedir que vuele.
Dependiendo del material con el que estén fabricados los muebles, serán más o menos frágiles. Si repasamos los materiales, determinaremos que de más a menos delicado es: ratán natural, ratán sintético, madera, resina, aluminio y acero inoxidable.
¿Cuáles son las mejores fundas para los muebles de exterior?
Materiales y lonas para poder proteger el mobiliario de exterior hay de muchos tipos, pero no es lo mismo un plástico que una funda diseñada para una pieza de mobiliario concreta. Piensa que esta segunda solución contempla todas las características del objeto, cubriendo y protegiendo cada parte de manera adecuada. Además, las fundas para muebles de jardín cuentan con cierres específicos y elementos de ajuste.
Una funda de calidad excelente evitará problemas como: filtraciones, agua, humedad, moho, polvo, decoloración, manchas o daños y golpes.
Ten en cuenta que una buena funda te asegura prolongar la vida útil de tus muebles.
Fundas de tela: tipos y materiales
La telas más eficaces para proteger los muebles son las sintéticas, como poliéster o polietileno, debido a sus características de resistencia en el tiempo, imputrefacción y impermeabilidad en ciertas condiciones. Además, se trata de materiales fácilmente reciclables y waterproof.
Otros factores a tener en cuenta es que sean tejidos repelentes e impermeables, para que el agua no penetre y resbale; como también el tipo de costura, para que no se deshilachen. Conviene mirar si llevan pespuntes y puntadas tipo tapping, es decir, una banda termoadhesiva que se aplica sobre la costura con el fin de sellarla perfectamente.
El gramaje de la tela de protección también tiene una incidencia importante en su resistencia. En efecto, una tela con un gramaje pesado será más espesa y por lo tanto más resistente. Esta tela tendrá menos riesgo de desplazamiento o movimiento.
Fundas específicas para cada tipo de mueble
Como cada elemento posee una forma y tamaño distinto, es 100% recomendable que la funda que se utilice sea la más indicada. En el mercado encontrarás fundas diferenciadas para cada mueble de exterior: sillones, mesas, barbacoas, tumbonas, etc… Están diseñadas para proteger eficazmente el mueble en si y cuentan con elementos determinados para que su uso sea fácil y cómodo.
Por ejemplo, para evitar la necesidad de subirse a una silla o escalera a la hora de ponerle la funda a una sombrilla o parasol, las más modernas y mejor diseñadas cuentan con una cremallera a lo largo de toda su longitud.
Otro elemento muy cómodo son las asas, que permiten instalar y ajustar fácilmente la funda garantizando un mantenimiento perfecto. Una vez la funda está instalada, también ayudan en el momento de quitarla y guardarla.
Como ya hemos comentado anteriormente, hay incluso soluciones específicas para cada tipo de mueble de jardín, como son los elevadores de mesas, también denominados Pop´Up o Table´Up. Éstos elevan las mesas evitando la humedad por capilaridad, o bien, elevan la funda dejando que circule el aire y no haya riesgos de estancamientos de agua y hongos o moho.
Otro elemento como los cordones permiten asegurar y fijar las fundas para que no las mueva el viento, y las bandas elásticas son muy cómodas a la hora de colocar la funda y que ésta quede pegada al mueble.
3 consejos para elegir funda protectora para muebles de jardín
1. Toma medidas de tus muebles de jardín
Primero de todo hay que asegurarse de que la funda adquirida cubra bien el mobiliario. Ten en cuanta que hay personas que no se toman su tiempo a la hora de asegurar las dimensiones de los muebles a proteger y, después, se dan cuenta que la funda no se adapta bien al elemento a cubrir. Los cobertores demasiado grandes acaban arrastrándose por el suelo y acumulando polvo, suciedad y agua. Además, si son demasiado amplias, pueden crearse cráteres y acabar acumulando agua; en cambio, si está más tensa o se adapta a la perfección, el agua resbala consiguiendo que le mueble permanezca seco.
2. Elige material y calidad
Existen muchos materiales aptos para cubrir los muebles de jardín, aunque, como en cualquier otro producto, encontramos diferentes grados de eficacia y calidad. En Digebis apostamos por el poliéster de alta calidad en nuestras fundas para muebles de jardín . Se trata de un material muy resistente que, además, es 100% impermeable. Por otra parte, el poliéster es una fibra sintética que absorbe poca humedad comparado con otros tejidos.
Si tus muebles están fabricados de madera u otra fibra natural, las fundas más idóneas son las Aerocover, fabricadas con un tejido ligero de poliéster antidesgarro, pues incorpora un entramado de hilos más gruesos de alta resistencia (ripstop) recubierto por una membrana transpirable.
Al ser transpirable evita que se cree moho o habiten parásitos cuando se genera condensación por los cambios de temperatura. De esta manera los muebles de exterior «respiran».
3. Accesorios para fundas de jardín
Una buena funda para el exterior, jardín o terraza estará diseñada con todos los detalles para una mejor adaptabilidad al mueble. Por ejemplo, para evitar que se muevan debido al viento, todos los modelos de Digebis cuentan con accesorios de ajuste. Este es el caso de las fundas EasyCover; dicha gama lleva cordones de nylon y cierres automáticos asegurando la sujeción.
Otro ejemplo, son las fundas Aerocover, que cuentan con las denominadas membranas Aerocover, diseñadas expresamente para evitar la formación de moho y la proliferación de bacterias. Además, en la parte superior de la funda está recubierta con un tipo de cinta adhesiva resistente al agua y que ayuda a que no traspase el agua.
Todo los tipos de complementos descritos son detalles que mejoran la eficacia de las fundas y nos permiten asegurar la protección de los muebles de jardín.
Como puedes comprobar, siguiendo estos tres sencillos pasos, tienes la información completa que te permita escoger el mejor modelo de fundas para proteger los muebles de exterior.
¡Descubre nuestras fundas para muebles de jardín!
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Si quieres presentar un proyecto de diseño de jardín o terraza con muebles te recomendamos indicar también las fundas a tus clientes, así su ambiente de relax estará siempre en perfecto estado. Para saber más sobre cómo comprar fundas de muebles para exterior con tecnología y cualidad, ponte en contacto con nosotros.