Dejar los aparatos eléctricos en standby (sí, con el pilotito rojo encendido), además de acortar su vida útil, es el ejemplo más práctico de los detalles que hacen que tu casa gaste mucha más energía de lo que debería y que, por tanto, sea poco sostenible.
Está más que claro que todos queremos legar a las nuevas generaciones un planeta en condiciones: un mundo en el que todas las especies puedan convivir y cuya biodiversidad esté garantizada. Partiendo de este argumento, lo más razonable sería que empezáramos por convertir nuestra casa en un hogar más ecológico.
Para que se eviten futuros desastres medioambientales, es imprescindible un cambio en las políticas gubernamentales que obliguen a las grandes potencias a regular sus vertidos químicos y su liberación de CO2 a la atmósfera. Sin embargo, las iniciativas a nivel personal suman y ayudan. Así que, ¿por qué no dar ejemplo?
Desde Digebis te traemos 5 consejos que deberías poner en práctica, si quieres logar que tu hogar sea más verde.
Mi casa: un hogar más sostenible y ecológico
1. Haz un uso razonable de los equipos de refrigeración y calefacción
Si tu inmueble cuenta con equipos de calefacción o aire acondicionado, recuerda hacer un uso razonable: no abuses de ellos. De este modo no solo estarás cuidando el medioambiente, sino que además ahorrarás mucho en tus facturas.
Prueba estas temperaturas y verás los resultados:
- Regula tu calefacción hasta los 20 grados.
- Programa el aire acondicionado a unos 25 grados.
- Dúchate con agua a 35 grados (este es el punto más controvertido, puede que tengas que terminar con lo de convertir tu baño una sauna)
¡Te lo aseguramos!, cada grado de más se verá reflejado en el planeta, pero también en tu cuenta corriente.
2. Aprovéchate de los recursos naturales que están a tu alcance
Vale, lo sabemos, instalar placas solares, cambiar ventanas, hacer terrazas o colocar sistemas similares, supone invertir una cantidad de dinero muy elevada y no siempre es posible gastar tanto en adaptar nuestras casas, pero se pueden hacer pequeños gestos que están al alcance de todos.
Si bien es cierto que a largo plazo vas a ahorrar mucho en las facturas, apunta estos sencillos pasos para proteger el planeta, mientras proteges tu cartera:
- Puede sonar muy tonto, pero haz todo lo posible por aprovechar la luz del sol. No enciendas las luces hasta que sea estrictamente necesario.
- Pinta las paredes de colores que te ofrezcan luminosidad.
- Para reducir el uso del aire acondicionado, abre varias ventanas de la casa y crea corrientes naturales de aire en los momentos más frescos del día, a primera hora de la mañana y tras el anochecer. Te informamos de que se trata de un método mucho más sano, así que, en teoría, estás protegiendo también, tu salud.
3. Realiza sí o sí estos cambios en tu cocina
Como te comentábamos al principio, hay ciertos detalles que te van a ayudar mucho a ahorrar, como a conseguir un hogar mucho más ecológico. Uno de los focos del problema o quizás, de los puntos de mayor contaminación de tu hogar es la cocina. Así que, apunta:
- Usa la olla a presión siempre que puedas. Este aparatejo te va a hacer la vida mucho más fácil, ya que con el ahorrarás tiempo, dinero y energía.
- Cada vez que se abre un horno en funcionamiento, su temperatura disminuye al menos 20 grados. Ahora que ya lo sabes y, si lo estás utilizando, mira la comida a través del cristal en vez de abrirlo, ¡no tengas tantas ansias!
4. No dejes los aparatos en stand by y llénalos al máximo cuando los utilices
Cambiar una costumbre que en primera instancia puede parecer tan tonta como apagar completamente tus dispositivos electrónicos, puede evitar gran parte del daño que hacemos al planeta. Antes de dejarlos encendidos deberías pensar lo siguiente: no solo eres tú, sino otros millones y millones de personas que dejan su televisor y otros dispositivos en stand by. Te animamos a que, a partir de ahora, procures no hacer esto y de paso, aumentes la vida útil de tus aparatos, protejas el planeta y ahorres en tu factura de la luz. ¡Todo en el mismo gesto!
Por otro lado, y aunque pueda sonar muy lógico, llena al máximo tu lavadora y tu lavavajillas, evita el prelavado y usa el agua fría siempre que sea posible.
5. Dile sí a las bombillas de bajo consumo
Por último, pero no menos importante, elige bombillas de bajo consumo o LED. Sí, también sabemos que son un poco más caras, pero como te hemos repetido a lo largo de este post: gasta un poquito más en un principio, para ahorrar mucho más al final.
¿Sabes que este tipo de luces duran hasta 8 veces más y consumen un 80% menos de energía?
En definitiva, lo que queremos trasmitirte es que, aunque parezca mentira, los pequeños gestos cambian las cosas y que todos y cada uno de nosotros, tenemos en nuestras manos la posibilidad de mejorar el mundo en el que vivimos.
Digebis lleva desde sus comienzos estableciendo políticas e iniciativas que protegen el medioambiente y, 20 años después, ratificamos nuestro compromiso por enfocarnos en la contribución a los ODS de la Agenda 2030, ¡porque no tenemos un planeta B!
