¿Te has encontrado tu jardín encharcado después de un día lluvioso? ¿O después de regar ves que el suelo tarda demasiado en absorber el agua?
Si es tu caso, posiblemente no cuentes con un buen sistema de drenaje, y si no pones un remedio puede desencadenar a un problema con tu jardín. El encharcamiento del suelo es un problema común que afecta tanto a las plantas como a la estética del área exterior sea en un jardín con plantas, con césped artificial o en los caminos de acceso.
Por tanto, si quieres evitar estos encharcamientos en tu terreno o si ya te ha ocurrido y quieres prevenirlo, ¡sigue leyendo! En este artículo te daremos consejos útiles para tener un buen sistema de drenaje y evitar los encharcamientos en tu jardín y en las zonas de acceso.
¿Qué es el drenaje del suelo y por qué es importante?
El drenaje del suelo es un proceso fundamental en la gestión y el mantenimiento de espacios exteriores, sea jardín, terrenos o entradas. Consiste en la capacidad del suelo de eliminar el exceso de agua de manera eficiente, evitando el encharcamiento.
Un sistema de drenaje adecuado es un factor crítico que influye tanto en la salud de las plantas, del césped como en la estructura del suelo, comprometiendo la estabilidad en entradas y senderos.
Mediante el drenaje se absorbe el agua de la superficie del terreno, evacuándola fácilmente y ayudando a que se filtre y se mueva hacia capas más profundas. Además, se regula la humedad para que sea la apropiada para el entorno. Este sistema es fundamental para el mantenimiento de tu jardín, ya que ayuda a evitar encharcamientos indeseados y acumulaciones de agua.
No obstante, el drenaje también proporciona mejoras en la aireación, la exploración radicular y el aumento de nutrientes para tus plantas. Facilita la remoción de sales y evita la desalinización de los suelos. Estos casos suelen darse cuando el jardín no cuenta con un césped natural para absorber el agua o cuando se trata de grandes cantidades.
¿Cómo comprobar el estado de mi drenaje? Evaluación del sitio
Antes de embarcarse en la tarea de mejorar el drenaje en tu jardín, es fundamental realizar la exploración del sitio. Si quieres saber si tu suelo tiene o no un buen drenaje, existen diferentes métodos para poder comprobarlo. Varias señales revelan si tenemos problemas de drenaje, como áreas de jardín que permanecen encharcadas tras la lluvia o el riego, presencia de musgo y algas en el suelo, o incluso la inclinación del terreno.
Como hemos comentado anteriormente, una manera sencilla para poder examinarlo es en los días más lluviosos. Es entonces cuando podemos ver si hay zonas con acumulaciones de agua o que tengan mayor dificultad para poder absorber correctamente el agua de la lluvia.
De igual medida, cuando tengas que regar tu jardín, podrás comprobar si también tarda la superficie en drenar el agua. También puedes escarbar un hoyo lo suficientemente hondo de tu jardín e introducir agua, si ves que pasado un tiempo el agua sigue estancada, es un claro indicador de que no constas con un buen drenaje y tu jardín necesita una mejora.
¿Cómo hacer un buen drenaje en el jardín?
Si ya conoces la respuesta de que debes mejorar el drenaje, en Digebis te mostraremos cómo puedes hacer y qué usar para tener una buena filtración del agua y evitar los encharcamientos.
Preparar el terreno
Antes de comenzar cualquier trabajo, es crucial preparar adecuadamente el terreno. Elimina las malezas y limpia los escombros que puedan obstruir el flujo del agua. Y, lo más importante, la nivelación de las áreas hundidas. Muchos de los problemas suelen darse a causa de desniveles en el suelo del jardín, un punto fácil para la acumulación de agua. Es importante que nuestro jardín tenga una estructura estable y sólida para evitar zonas que creen acumulaciones de agua, sobre todo en zonas de paso, que son las zonas más transitadas, y puede provocar un problema mayor.
Drenaje en el jardín con césped natural
Tener un exuberante césped verde puede ser el objetivo principal en el diseño del jardín. Sin embargo, mantener un césped saludable requiere una atención al drenaje. Si tu césped natural se encharca, la solución más sencilla y efectiva es la creación de zanjas de drenaje con una suave inclinación, rellenadas con un sustrato de arena sobre una base de grava para garantizarlo. De esta manera se facilita la evacuación del agua y protegen del exceso de humedad.
Esta estructura cuenta con materiales ergonómicos y flexibles lo que permite adaptarse a las distintas necesidades de los jardines, indiferentemente de si cuentas con desniveles.
Cómo conseguir un buen drenaje del césped artificial
La capacidad de drenaje del césped artificial es una de las dudas más comunes a la hora de elegir uno para tu jardín, indiferentemente si se desea su instalación en una superficie dura con suelo firme o sobre tierra. En general nos puede preocupar que el agua no se filtre adecuadamente y aparezcan charcos.
Para mejorar el drenaje y evitar la acumulación de agua en la superficie en este tipo de jardines, se recomienda la instalación de protectores de césped si hablamos de una zona con más tráfico, láminas de drenaje o bases de grava que permitan que el agua se filtre hacia el suelo subyacente.
Utilizando estos sistemas se garantiza que el césped artificial de tu jardín se mantiene en condiciones óptimas y se reduce el nivel de encharcamiento.
Encharcamientos en entradas, caminos de acceso o senderos
Los encharcamientos en entradas y caminos de acceso son un problema común que puede afectar tanto a la estética como a la funcionalidad de cualquier jardín o propiedad. El exceso de agua estancada causada por el mal drenaje, la compactación del suelo o la falta de permeabilidad de la superficie puede crear inconveniente y riesgos para la seguridad.
Si este es tu caso, los estabilizadores de grava instalados bajo las gravas o cantos rodados decorativos mantienen el suelo en su lugar y estabilizan el terreno. Además de mantener el terreno firme, mejoran el drenaje y facilitan la circulación en caminos de accesos, zonas peatonales, pasillos, terrazas, caminos y senderos, es decir, en todas aquellas superficies que necesiten gravas.
En conclusión, asegurar un buen drenaje y evitar el encharcamiento es importante para la salud y la belleza de nuestro jardín. Implementando técnicas adecuadas como la creación de zanjas en zonas con césped natural o el uso de láminas de drenaje en las instalaciones del césped artificial, y mantener estable y sin charcos los senderos y los caminos, podemos disfrutar adecuadamente de nuestro jardín en todas las estaciones sin preocuparnos de las posibles acumulaciones de agua en las estaciones lluviosas.